Patrick Martin Ashbridge, un abogado que se ha ganado la confianza de la clase acomodada de Tumacacori, en la frontera de Estados Unidos con México, recibe la inesperada visita de su hermano menor Donald, prófugo que cumplía condena por un intento de asesinato, hombre débil, irresponsable y, sin embargo, dotado de un extraño poder de persuasión. La llegada del fugitivo, que confía en cruzar la frontera aprovechando la crecida del río Bravo con las inmisericordes tempestades de la estación de lluvias, alterará la tranquilidad de la pequeña comunidad de rancheros y enfrentará a los dos hermanos, que se debatirán entre el amor y el odio, el rencor y la culpa. En este paisaje tan inexorable como el destino, cuya realidad social e histórica sigue invariable, Simenon urde uno de sus más notables romans durs, el primero de su etapa americana, donde recrea una compleja trama familiar de resonancias bíblicas, freudianas y, por qué no, autobiográficas.